¿Una nueva era de baterías de hierro?

El hierro, uno de los metales más comunes y difíciles de obtener en la Tierra, ha sorprendido a los científicos. Un equipo de Stanford ha descubierto una forma de llevar al hierro a un estado energético nunca antes observado. Este avance podría revolucionar el futuro de las baterías de iones de litio y otras tecnologías energéticas.

La investigación demuestra que el hierro puede ceder y reabsorber hasta cinco electrones, frente a los dos o tres que se suponían anteriormente. Esto significa que las baterías podrían ser más potentes y económicas que las basadas en cobalto o níquel. El descubrimiento también podría tener implicaciones para otras tecnologías como las máquinas de resonancia magnética, los trenes magnéticos y los superconductores.

Tres estudiantes de doctorado de Stanford, Hari Ramachandran, Edward Mu y Eder Lomeli, lideraron un equipo de 23 investigadores de Estados Unidos, Japón y Corea del Sur. La innovación clave fue la estructura a nanoescala de un compuesto de litio, hierro, antimonio y oxígeno. Al reducir el tamaño de las partículas a 0,3-0,4 micrómetros, permitieron que los átomos de hierro intercambiaran cinco electrones sin alterar la estructura cristalina.

El análisis de los espectros de rayos X realizado por Lomeli confirmó que el oxígeno desempeña un papel fundamental. «Se trata de la acción coordinada de toda la estructura», afirmó. Las pruebas en el centro SLAC han demostrado que el compuesto se curva ligeramente durante la carga, pero se mantiene estable. Aún se desconoce cuándo se implementará esta innovación.